viernes, 17 de noviembre de 2023

Túneles (poema)


Debajo de mi casa corría un túnel.
Lo supe un día al tirar de la cadena —alguien se quejó abajo, me pidió que fuera a cagar a otro sitio.
Parece ser que les caía todo el mondongo en la cabeza.
Desde aquello hice mis necesidades en un cubo.
También me dijeron que me duchara con agua fría —que el agua caliente les quemaba la cara.

Un día salió alguien de abajo por un armario.
Me hizo un gesto de silencio y se encendió un cigarro — si fumaban abajo, el túnel se les llenaba de humo.
Se pilló unos cereales y hojeó mis cómics —creo que abajo no les dejaban tener más que libros sin ilustraciones.
Antes de volver al túnel sacó unos cables y una antena para coger la señal del fútbol.

Si lo piensas, es un poco incómodo tener un túnel debajo de tu casa. 
Comencé a andar de puntillas, con miedo de que una canica molestará a los de abajo — pero también es verdad que te acostumbras.
Los de abajo son muy discretos. 
En principio son personas como las de arriba, solo que no puedo asegurarlo —nunca fui allá abajo. 

Una noche soñé que bajaba y era un sitio muy normal .
No había arañas ni ratas —pero no tenían cereales ni cómics.
Se estaba tranquilo menos cuando te caía la caca de los vecinos encima —hay gente que no tiene cuidado.

Todo se acabó de repente cuando chocaron con algo duro y no pudieron continuar el túnel.
Entonces los de abajo se pusieron nerviosos, cavaron por sitios equivocados —y ahí empezó el colapso.
Muchos salieron por los armarios, otros por los wáteres.
Todos tosiendo y con el pelo lleno de tierra —me llamó la atención que algunos salían fumando.

En fin, el vecindario se vino abajo con los túneles.
Todas las calles, las casas, el parque.
Yo traté de salvar los cómics entre los escombros.
Los supervivientes nos miramos raro —como si la mayoría no supiera que vivíamos con ese queso de túneles con personas debajo.


—un poema de Tive Martínez, 2023
—ilustración de PantheraLeo1359531 licencia Creative Commons


jueves, 2 de noviembre de 2023

En mi pelo negro flores de granado, por Sanaz Davoodzadeh Far

 

en mi pelo negro

flores de granado


este otoño huele a primavera


.


esta vez la libertad

de mi pelo

se alzará


viento!

agita mi pelo!


bala!

esta vez

mi cuerpo no tiene límites para ti


dispara!

dispara!

mi pelo ondea al viento

y te sofocará


bala!

balas!

llevamos el miedo

en nuestras heridas


hemos enterrado

la libertad


beso tus labios


.


en mi mirada

un ciervo


la paz

cruzará un paso lleno de minas


quizás la explosión

será el final de todas las guerras



-un poema de Sanaz Davoodzadeh Far, 2023

publicado originalmente en el número 22 de la revista Humanity (Rusia)

- traducción de Tive Martínez

jueves, 3 de noviembre de 2022

POEMA SOÑADO

 


Quem vem vindo ali / tá capengando numa perna só

Só pode ser coisa ruim / como bem já dizia minha vó

(Paulo César Pinheiro)


Nuestra casa, tan pobre que entran las hojas secas, entran palitos, entran plumas, entran ratones, entra
el remolino.

Una noche entró una pierna, toda larga y musculosapierna bonita articulada, pierna ágil de hombre
araña.

Saltó sobre la mesa de la cena y caminó entre los platos puestos con huevo y patatas fritas, pisó las migas
del pan.

Sobre la punta del dedo gordo, hizo piruetas, se miró en el reflejo del agua de los vasos, bailó una jota, nos hizo
risas.

Los mayores no querían una pierna encima de la mesa, no querían que bailara, la querían fuera
de casa.

Y ya no volvió a entrar la magia por el roto de la puerta. ¡Que no estaba sucia, que era alegre, jotera
y limpia!

Pero la puerta sigue 
rota.


—soñado por Tive Martínez en la madrugada del Día del Sací, 2022


miércoles, 18 de mayo de 2022

CAMISETA MOLONA

 


Yo soy aquel que va al trabajo con una gorra descolorida que pone Amsterdam.

La compré para el sol cuando estuvimos en Amsterdam y siempre me recuerda a los flamencos color de rosa

que nos llevó a ver Nadia de Vries, tan alta y tan rubia como nosotros bajitos y morenos.

Una cosa que tiene usar la misma ropa durante años es que se le van pegando los recuerdos como pelos de gato.

Todas las camisetas que tengo las compré de golpe en un 3 x 1 y son las que uso para todo.

Para trabajar o para dormir me pongo la misma camiseta blanca con el T-Rex de Basquiat que llevaba puesta en una visita al Musée d’Orsay

donde me dijeron hey, nice T-Shirt!

Está tan esmerada la camiseta que se me transparenta el ombligo
Pero no estamos para tirar.

Aquí no se tira nada.

 

-un poema de Tive Martínez, 2022

jueves, 17 de marzo de 2022

AHÍ, PRECISAMENTE

 

 

Como cuando se te engancha una langosta

en el pelo, y el pobre bicho se agarra 

con sus patitas crujientes.
 

Y lo dejas estar por no romperle nada porque

no hace ningún daño. Eso fue lo que pasó

con aquella señora del asilo.

 

Ella estaba con su hija, y yo solo de visita,

pero fue entrar y arrojárseme a la entrepierna

con toda su alma.


La hija se afanó por separarnos,

como si viera en el ademán demencia,

pues no la calaba.


Los viejos necesitan a los jóvenes

para no morir. Se mueren por una caricia

de carne viva.


Dejé que se aferrara ahí, 

precisamente. No quise soltar los nudos

de una mano tan delicada.



--un poema de Tive Martínez, 2022

 

miércoles, 26 de mayo de 2021

CENA FRUGAL (un poema)

 


No soporto los vinos.
Peores cuanto más caros.
Doy un sorbo y pienso qué le habrán
metido en la barrica para darle gusto.

Qué jamón podrido.
Qué gato muerto.

Veo el rodal que deja en la mantelería
y calculo el precio de quitar la taca.
A cuánto el escurrín.
La última lágrima.

Me invitaron una vez a una cena
por una razón que no viene al caso.
Ví lo que costaba el vino
y se me encogió el diafragma.

Água me pedí
y no probé ni el agua.


-un poema de Tive Martinez, 2021


domingo, 23 de mayo de 2021

DANCIN' IN THE MOONLIGTH (un poema)



Domingo en la mañana es día de prodigios. 
Hoy toca saber cómo resuelve Spider-Man
su enfrentamiento con el Lagarto.

De paso, ya que voy al quiosco, veré

qué otras maravillas me ofrece Marvel

—DC todavía no forma 
parte de la compra semanal.
La verdad es que estoy súper 
animado
 —por fuera parezco el típico treintañero friqui que camina raro
por dentro voy emulando la performance de Ted Raimi 
en aquel episodio musical de Xena, la Princesa Guerrera. 
Mi percepción del mundo está alterada 
—me fijo en cosas que normalmente no tendrían relevancia.  
Al final de la calle un coche viene haciendo giros
extraños, todavía
está lejos pero se aproxima
a demasiada
velocidad.
Me pilla con un pie
it's a suppa-
CRAAASH!!! /-natural delight! en el aire
y se estrella contra la reja de un comercio cerrado.

Tengo la sensación de haber hecho un
quiebro
con la cadera, al ritmo
funky-disco 
everybody feelin' warm & bright!
El conductor sale del siniestro con los dedos
en
un ángulo imposible, riendo y sangrando.
Me mira como queriendo
seguir la fiesta,
pero yo miro la papelera
descuajarringada
a mi lado y continuo
hacia el quiosco,
donde descubriré que me hice
un rasguño
por debajo de la rodilla —y que el Buitre será
la próxima amenaza para Peter.

 

-un poema de Tive Martinez, 2021

Túneles (poema)

Debajo de mi casa corría un túnel. Lo supe un día al tirar de la cadena —alguien se quejó abajo, me pidió que fuera a cagar a otro sitio. Pa...